En 2026 entra en vigor en España un nuevo marco regulatorio que redefine cómo se diseña y comunica en digital: más transparencia en la publicidad, fuertes límites al perfilado (especialmente de menores) y sanciones que pueden alcanzar un porcentaje relevante de la facturación de una marca. Para diseñadores y marketers, esto significa decir adiós a los dark patterns, integrar la “capa legal” desde el briefing y apostar por creatividad basada en contexto y valor de marca, no en datos personales sensibles.